La colonización encuentra sus cimientos en la pérdida de la memoria histórica y la identidad cultural del pueblo. Para que este proceso se mantenga, se requiere despojar al pueblo de sus lenguas, memoria, conocimientos, espacios y la espiritualidad. Los invasores-colonizadores de ayer y de hoy han mantenido una permanente subordinación ideológica del colonizado a través de la lengua del dominador. Al evitar nombrarlo, lo desconoce, lo reduce, lo desaparece. Lo convierte en ?indio o mexicano?, pero no lo reconoce como anahuaca.
https://youtu.be/hUpSQV_QJUc
Los invasores-colonizadores de ayer y de hoy han mantenido una permanente subordinación ideológica del colonizado a través de la lengua del dominador. Al evitar nombrarlo, lo desconoce, lo reduce, lo desaparece. Lo convierte en ?indio o mexicano?, pero no lo reconoce como anahuaca.
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