La colonización del Anáhuac no ha terminado. Por el contrario, hoy es más coercitiva, represiva y extractiva que en la Colonia. Los criollos se han asociado con los países y corporaciones extranjeras para explotar a los anahuacas y depredar sus todavía cuantiosos recursos naturales. Para ello, han usado tres dogmas y cinco estrategias que les han dado excelentes resultados.
La colonización del Anáhuac no ha terminado. Por el contrario, hoy es más coercitiva, represiva y extractiva que en la Colonia. Los criollos se han asociado con los países y corporaciones extranjeras para explotar a los anahuacas y depredar sus todavía cuantiosos recursos naturales. Para ello, han usado tres dogmas y cinco estrategias que les han dado excelentes resultados.